VALLADOLID, 14 de octubre.

En un avance significativo hacia la revitalización cultural, la Junta de Gobierno Local ha autorizado la concesión de licencia de obras para la restauración integral del majestuoso conjunto catedralicio de Valladolid. Este ambicioso proyecto no solo preservará el patrimonio histórico, sino que también creará nuevos espacios públicos y culturales, comenzando por la apertura del emblemático Patio de los Cipreses, que dará acceso directo a la Plaza de la Universidad.

Entre las iniciativas más destacadas de esta restauración se encuentra la creación de un nuevo Museo Diocesano y la recuperación de la histórica Puerta de Santa María. Asimismo, se adecuarán los espacios encima de las capillas del lado del Evangelio, donde se establecerá la Biblioteca Diocesana, la cual contará con un acceso conveniente desde la Plaza de Portugalete.

El Ayuntamiento ha detallado que las intervenciones museísticas incluirán la restauración de las instalaciones existentes, incorporando trabajos de limpieza y consolidación de las estructuras, así como la reparación de las cubiertas y la instalación de una cámara bufa. Se renovarán los pavimentos interiores, que no son de interés histórico, para adaptarlos a las canalizaciones y a las normativas del Código Técnico de Edificación.

Además, el plan contempla una mínima ampliación que se ejecutará sobre una base de losa rígida de hormigón, utilizando una estructura metálica y cerramientos híbridos de ladrillo y sillería caliza. También se incorporará tabiquería de cartón yeso y madera, con una cubierta ligera de cinc, junto con la limpieza y restauración de los paramentos adyacentes y la incorporación de iluminación LED.

Otra de las innovaciones del proyecto es la construcción de una escalera y un ascensor en el lado norte, que facilitarán el acceso al nivel de la biblioteca, integrándose armoniosamente en el conjunto arquitectónico.

El diseño de esta restauración se ha dividido en cuatro áreas, considerando la variada naturaleza histórica y constructiva de cada una. El objetivo principal es dotar de cohesión a los distintos elementos que han ido configurando el conjunto catedralicio a lo largo del tiempo.

Desde el Ayuntamiento han enfatizado la importancia de minimizar los elementos discordantes que podrían entorpecer la apreciación del conjunto catedralicio, buscando así una experiencia de contemplación más unificada y armoniosa.