VALLADOLID, 1 de enero. En una noche marcada por la celebración y la convivencia, la sala de emergencias de Castilla y León 112 registró un total de 837 llamadas durante la Nochevieja, abarcando desde la medianoche hasta las 08:00 horas del día siguiente. Entre el flujo de comunicaciones recibidas, se gestionaron 45 alertas relacionadas con peleas o agresiones, aunque afortunadamente, no se reportaron heridos de gravedad.

La noche comenzó con un inusual inicio cuando, apenas pasados unos segundos de la medianoche, la primera llamada entrante provino de Honrubia de la Cuesta, en Segovia, donde se notificó un incendio en una zona agrícola. Este incidente marca el comienzo de una Nochevieja donde, a pesar de la festividad, surgieron varias situaciones de emergencia.

En términos de agresiones, el balance fue significativo, con un total de 26 incidentes reportados. Las provincias se vieron afectadas de diversas maneras: se registraron tres agresiones en Ávila, cinco en Burgos, una en León, tres en Palencia, tres en Salamanca, una en Segovia, ocho en Valladolid y dos en Zamora. Estos datos reflejan la realidad de un ambiente festivo que, en ocasiones, puede tornarse violento.

Asimismo, la sala de emergencias también tuvo que atender 19 avisos relacionados con peleas. El desglose geográfico de estas situaciones revela un patrón inquietante: dos en Ávila, seis en León, dos en Palencia, tres en Salamanca, una en Segovia, una en Soria, dos en Valladolid y dos en Zamora, un claro indicativo de que el descontrol a veces permea las celebraciones comunitarias.

Por otra parte, el área de la salud pública también requirió la atención del 112, con un total de 72 incidentes sanitarios registrados en lugares públicos. Además, se contabilizaron 71 avisos relacionados con ruidos y molestias, ya sea provenientes de vecinos, de la vía pública o de establecimientos abiertos al público. Este panorama resalta no solo los desafíos de mantener la calma en una noche de festividades, sino también la necesidad de un compromiso colectivo hacia una convivencia pacífica y respetuosa.