El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, ha manifestado su desacuerdo con las negociaciones de Pedro Sánchez con los independentistas para asegurar su investidura. Concepción considera que la posible amnistía para los líderes separatistas sería "un golpe mortal al Estado de Derecho" y una falta de respeto a la justicia al otorgarle a una persona prófuga de la justicia la condición de interlocutor político.
Estas declaraciones las realizó durante la ceremonia de apertura del año judicial en Castilla y León, que tuvo lugar en el Palacio de Justicia de Burgos y contó con la presencia del Fiscal Superior de la Comunidad, Santiago Mena.
Concepción también mostró su oposición al Derecho de Gracia, calificándolo como una reminiscencia de las monarquías absolutas que no encaja bien en un Estado moderno como el nuestro. Además, señaló que si se utiliza de manera no contemplada en nuestra Constitución, la oposición debe ser contundente.
El magistrado explicó que el único tipo de indulgencia contemplada por la Constitución es el indulto, y que este no puede ser general ya que va en contra de la exclusividad de la función jurisdiccional de los jueces y magistrados, así como del principio de igualdad ante la ley.
Concepción afirmó que la amnistía implica eliminar no solo algunas de las consecuencias del delito, como el indulto, sino también la existencia misma del delito. Consideró que dar a entender a los sediciosos que tenían derecho a hacerlo sería un golpe mortal al Estado de Derecho, poniendo en duda la labor judicial y justificando conductas destinadas a destruir España y atentar contra la Constitución.
El presidente del TSJCyL también reclamó un gran Pacto de Estado para la Justicia, que permita renovar las instituciones y mejorar los medios con los que trabajan los jueces. Además, destacó la necesidad de realizar reformas legislativas para acabar con la percepción de contaminación política en la Justicia, que atribuyó al modo de elección del Consejo General del Poder Judicial.
Con respecto al funcionamiento de los órganos judiciales en Castilla y León, Concepción lamentó que hayan sufrido retrasos en sus tiempos de respuesta y hayan perdido su excelencia. La pandemia y las dos huelgas ocurridas durante los primeros meses del año han paralizado la actividad judicial, provocando la necesidad de ambiciosos planes de refuerzo que no siempre son atendidos por quienes tienen la responsabilidad de proveer los recursos materiales y humanos necesarios.
El magistrado reconoció y valoró el trabajo de los jueces y magistrados, quienes se comprometieron a dedicar su tiempo y esfuerzo personal a esta tarea de actualización. En el acto estuvieron presentes personalidades políticas y autoridades como el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y el vicepresidente, Juan García-Gallardo, entre otros.