El viaducto del Arco de Ladrillo, uno de los puntos neurálgicos del tráfico en Valladolid, ha reanudado su actividad vehicular en la mañana de este domingo 1 de diciembre, tras un cierre temporal que se tuvo que implementar el sábado por la noche. Esta interrupción se debió al avance de las obras que lleva a cabo el equipo de Gobierno, que buscan no solo la demolición, sino también el refuerzo y la reparación de la infraestructura que sirve como calzada.
La reapertura se llevó a cabo a las 7:30 horas, sorprendentemente, varias horas antes de lo inicialmente previsto, que era a las 15:00 horas. Esta noticia fue confirmada por el propio Ayuntamiento, que estima que el conjunto de estas obras concluirá para mediados de mayo de 2025, una fecha que promete un tránsito más seguro y eficiente para los ciudadanos.
El concejal de Tráfico y Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca, brindó detalles sobre el avance de las obras el pasado viernes, indicando que actualmente se ha alcanzado un 50 por ciento de la ejecución de las labores emergentes. Entre estas, destaca la reposición integral de la valla de contención en dirección a la entrada de la ciudad, un aspecto que resulta fundamental para la seguridad vial en la zona.
En la semana transcurrida, se finalizaron las intervenciones en la parte más cercana a la estación de autobuses. A partir de ahora, los trabajos se enfocarán en el área que aún no ha sido intervenida: la salida de la ciudad. Este cambio de enfoque será crucial para garantizar la fluidez del tráfico en ambas direcciones.
Es importante señalar que esta fase de trabajos requerirá el movimiento de piezas de hormigón y la repintura de la señalización horizontal, una tarea que obligó a establecer un corte de tráfico durante la noche del sábado. La elección de este horario se debe a que se considera estratéticamente como uno de los momentos de menor congestión a lo largo de la semana.
Los trabajos habían sido anunciados para comenzar el 31 de mayo de 2024, bajo un plan de ejecución que abarca un periodo de once meses, llevando a la conclusión de estas obras hacia finales de abril de 2025. Las primeras etapas de la obra consistieron en la ejecución de catas superficiales para evaluar el estado de la estructura.
El presupuesto de las obras asciende a 2,3 millones de euros. Estas actuaciones son parte de un proyecto más amplio en el marco del Convenio de la Sociedad de Valladolid Alta Velocidad (SVAV), que busca la integración ferroviaria en la ciudad y contempla la creación de un paso subterráneo, además de la eliminación de la estructura actual. Todo esto se realiza con el propósito de mejorar la movilidad y seguridad de los vallisoletanos en el futuro.
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.