VALLADOLID, 15 de agosto.

La situación en Castilla y León es crítica a causa de los numerosos incendios forestales que han surgido en la región, obligando a las autoridades a implementar cortes en varias vías de acceso. Las carreteras A-52 y N-525 en la provincia de Zamora, así como la N-621 en León, son algunas de las afectadas, según informes de la Dirección General de Tráfico (DGT).

Particularmente preocupante es el cierre de la A-52, que permanece intransitable desde el kilómetro 111 en Las Hedradas, hasta el 132 en Meson de Erosa, afectando ambos sentidos. Además, se ha registrado un corte en la misma vía entre el kilómetro 79 en Triufe y el 103 en Aciberos, en Zamora, todo ello debido al denso humo y la polvareda provenientes de los incendios.

En la provincia de Zamora, se ha restringido el paso en la N-525 desde el kilómetro 82,9 en Puebla de Sanabria hasta el 115,12 en A Canda en dirección a Ourense. La ZA-102 también ha sido objeto de cortes, concretamente desde el kilómetro 1,17 en Villanueva de la Sierra hasta el 13,48 en Barjacoba en ambos sentidos.

Por su parte, León no ha quedado al margen de esta emergencia, con el corte de la N-621 en Portilla de la Reina, que abarca del kilómetro 112 al 118, lo que interrumpe el tráfico en ambas direcciones.

En Salamanca, los incidentes han dado lugar a interrupciones en la circulación en la CL-526 en Dehesa de Perosin y la CL-517, desde Villar de Peralonso hasta Gomeciego, lo que demuestra la gravedad de la situación en la región.

Por último, en Ávila se están llevando a cabo cierres en la CL-505 desde el kilómetro 3,2 en la capital hasta el 21 en La Cañada, así como en la AV-500 desde el kilómetro 1 en la ciudad. Los efectos de estos incendios se extienden incluso a Segovia, donde la SG-500 en Villacastín ha sido completamente cerrada al tráfico.