BURGOS, 2 Jul.

La Comisaría de la Policía Nacional de Burgos ha informado de que la autopsia practicada a la joven de 20 años hallada muerta en Burgos determina, según el criterio forense, que la causa del fallecimiento es "compatible con un suicidio por ahorcamiento".

Esta trágica noticia ha conmocionado a la comunidad, ya que nos encontramos ante otro caso de violencia de género que ha llevado a la pérdida de una vida joven e inexplicablemente truncada. La violencia machista sigue arrebatando a mujeres sus sueños, sus futuros y sus vidas.

Además, la autopsia también ha revelado que la joven presentaba traumatismos previos al fallecimiento, lo cual demuestra que sufría violencia de género por parte de su pareja. Si bien, estos traumatismos no han sido la causa directa de su muerte, no podemos negar que la violencia ejercida sobre ella ha sido un factor determinante en su trágico final.

En este sentido, resulta indignante que la pareja de la víctima continúe detenida únicamente como presunto autor de un delito de violencia de género y no se le acuse de homicidio. La ley debe ser más contundente y no permitir que los agresores encuentren oportunidades para seguir dañando a las mujeres.

Nos encontramos ante una situación en la que la justicia debe actuar con firmeza y asegurarse de que esta joven no se convierta en otra estadística más de la violencia machista que azota nuestra sociedad. Es fundamental que se tomen todas las medidas necesarias para que este caso se esclarezca por completo y se haga justicia.

Desde aquí queremos mandar todo nuestro apoyo a la familia y amigos de la víctima, así como a todas las personas que luchan incansablemente en la lucha contra la violencia de género. No debemos olvidar que este problema no tiene cabida en nuestra sociedad y que cada uno de nosotros debe ser un agente activo en su erradicación.