Este 1 de mayo, miles de personas se manifestaron en las nueve provincias de Castilla y León convocados por CCOO y UGT para celebrar el Día Internacional del Trabajo bajo el lema "Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios". Reclamaron mejores condiciones laborales y subrayaron la necesidad de movilización ante la política de la "extrema derecha" en el Gobierno de la Junta con la "conveniencia" del PP. En la capital burgalesa, cerca de medio millar de personas participó en la manifestación y en la marcha también participó un nutrido grupo de socialistas burgaleses. En Palencia, alrededor de 1.200 personas se manifestaron para advertir a la patronal de la necesidad de bajar los precios para mantener sus márgenes de beneficios. En Soria, cerca de un millar de personas participaron en las manifestaciones y se registró un momento de tensión entre los manifestantes y los TADE.
En Segovia, unos 500 manifestantes pidieron una subida de salarios y el reparto de beneficios en una marcha que terminó en la Plaza Mayor. En Ávila, una protesta festiva recorrió el trayecto desde el centro de la ciudad y la Plaza de Santa Ana, donde se celebró un concierto. En Zamora, en torno a 500 personas se manifestaron para demandar mejoras salariales, reparto de los beneficios y un descenso de los precios. En León, varios centenares de personas secundaron las dos marchas convocadas, en León y Ponferrada, con reivindicaciones en común. En Salamanca, un millar de personas participaron en la manifestación, encabezada por una pancarta en la que se leía el lema de "Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios", y se pidieron negociaciones para mejorar las condiciones laborales ante la inflación "desbocada".
En Valladolid, unas 2.500 personas marcharon por el centro de la ciudad con cánticos reivindicativos y un manifiesto que pedía "justicia social, libertad, democracia y salarios justos". La manifestación comenzó en la Plaza de Colón y terminó en la Plaza Mayor, donde el secretario general de CCOO de Castilla y León, Vicente Andrés, advirtió de que si no se llega a un acuerdo nacional con la Patronal, se realizarán movilizaciones de huelga en todo el país. Además, reclamó al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que "tome decisiones de inmediato porque debe romper lazos con la extrema derecha para poder sacar a la Comunidad adelante". Por su parte, el secretario general de la UGT de Castilla y León, Faustino Temprano, criticó el "desmantelamiento del Dialogo Social por parte del Gobierno regional" y preguntó al presidente de la Junta "si va a renunciar al dinero que la Comunidad va a recibir por parte de la Unión Europea dedicado a programas de la Patronal y los sindicatos".
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