En la mañana del 6 de diciembre, la Junta de Castilla y León vibró con la conmemoración del 46 aniversario de la Constitución Española, un hito fundamental en la historia del país. El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, enfatizó en esta celebración la importancia de la Constitución como emblema de "libertad, igualdad y consenso", y aprovechó la ocasión para rendir un merecido homenaje al reconocido expresidente del Gobierno, Adolfo Suárez, originario del municipio abulense de Cabreros.

En un mensaje compartido a través de la red social 'X', Mañueco destacó el significativo comienzo de la etapa democrática en España y Castilla y León con la aprobación de la Carta Magna en 1978. Esta fecha no solo marcó un nuevo rumbo para la nación, sino que también sentó las bases para la diversidad y la pluralidad que caracteriza a la comunidad autónoma.

El presidente también subrayó el papel crucial que desempeñó Adolfo Suárez en la transición democrática del país, describiéndolo como un líder "clave" en este proceso. A su juicio, Suárez no solo fue fundamental para la consolidación de la democracia, sino que también fue pionero en la creación del Estado de las Autonomías, un avance que permitió dar voz a las diversas identidades y culturas de España.

En un año que marca el décimo aniversario del fallecimiento de Suárez, Fernández Mañueco reafirmó el compromiso de la comunidad con los valores que el expresidente representó: "libertad, concordia y progreso". Estas palabras son un recordatorio del legado perdurable que dejó Suárez, que aún resuena en el tejido social y político de Castilla y León y más allá.

Para finalizar su mensaje, Mañueco proclamó con orgullo que "desde Castilla y León, la tierra que vio nacer a Adolfo Suárez, celebramos este aniversario y su inmenso legado". Esta declaración de reconocimiento subraya el impacto histórico del expresidente en el desarrollo de la autonomía y la democracia en la región. "¡Gracias, Presidente, por ayudarnos a construir nuestra historia!", cerró Fernández Mañueco, una frase que encapsula la gratitud hacia un líder que dejó una huella indeleble en la historia moderna de España.