Sindicatos protestan contra la falta de flexibilidad de azucareras y levaduras en el convenio colectivo.
En Valladolid, hoy 10 de septiembre, los sindicatos Comisiones Obreras y UGT han dado inicio a una serie de concentraciones en las puertas de las fábricas azucareras y de levaduras. Esta acción se lleva a cabo debido al "estancamiento" en las negociaciones del nuevo convenio colectivo, que los representantes de los trabajadores atribuyen a la "intransigencia" de la patronal frente a una paga de 500 euros de carácter lineal.
La principal demanda de los sindicatos en estas negociaciones es precisamente la mencionada paga lineal de 500 euros, lo cual ha generado un quiebre en las conversaciones el pasado 15 de julio, cuando la patronal presentó su última oferta. Ante esta situación, se ha dado inicio a una serie de movilizaciones que han comenzado con una concentración en la fábrica de Acor en Olmedo (Valladolid) y seguirán en la Azucarera de Miranda de Burgos (Burgos) y las plantas de levaduras de Lesafre y AB Mauri en las próximas semanas.
"Si no se sientan a negociar con nosotros, es muy probable que recurramos a paros, movilizaciones y medidas más contundentes", advirtió Federico Muñoz Muñoz, representante sindical de CCOO en el centro de envasado de Benavente. Benigno Pérez, de UGT, secundó esta postura y no descartó la posibilidad de convocar una huelga durante las campañas. "Estamos dispuestos a llegar hasta el final", afirmó Pérez.
Según Muñoz, los aproximadamente 1.800 trabajadores del sector han experimentado una pérdida del 10% del poder adquisitivo con el anterior convenio 2021-2023. Por ello, ahora demandan esta paga lineal de 500 euros para contrarrestar en parte esta "brutal pérdida" y evitar más recortes en los salarios de todos los empleados.
"No se trata de ganar, sino de no seguir perdiendo", aclaró el sindicalista, destacando que las empresas han obtenido beneficios significativos en los últimos años que ahora deben distribuir entre la plantilla. Pérez solicitó a las empresas con beneficios o metas cumplidas que lleguen hasta los 1.200 euros para intentar recuperar la pérdida de poder adquisitivo y también exigió la reincorporación de una cláusula de revisión salarial que se perdió en un momento anterior y que las empresas rechazan recuperar ahora.
"No quieren la cláusula y tampoco aceptan la paga que solicitamos para intentar recuperar lo perdido, lo cual se perdió precisamente por no tener la cláusula", resumió el representante de UGT, quien se mostró satisfecho con la participación en la protesta de hoy.
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