En un viaje al pasado, Villanueva de Duero se sumerge en el siglo XVI para conmemorar la estancia del emperador Carlos V en la Cartuja de Aniago hace quinientos años. Este evento representa un importante referente histórico y motivo de orgullo para el municipio.
El emperador eligió la Cartuja de Aniago como lugar de reposo durante diez días en 1524, convirtiéndose en un punto de peregrinación y descanso. Para celebrar este quinto centenario, el Ayuntamiento ha preparado diez días repletos de actividades, que comienzan con la obra de teatro 'El último Emperador' de la compañía Mutis por el Foro en la Casa de Cultura El Corralón.
La agenda de eventos incluye talleres, la recreación de la llegada de Carlos V a la villa, conciertos renacentistas, conferencias, una cena medieval, una cata de vinos y una muestra de danzas de la Europa del Renacimiento.
En medio de la celebración, Carlos Belloso, presidente de la Asociación de Amigos de la Cartuja de Aniago, ha instado a las instituciones a buscar un acuerdo con la familia propietaria del inmueble para su rehabilitación. Desde la Desamortización de Mendizábal, la Cartuja ha quedado abandonada y en manos privadas, impidiendo cualquier intervención sin el consentimiento de los propietarios.
Belloso ha destacado la importancia de entablar negociaciones con la familia propietaria para una posible cesión al Ayuntamiento y así poder llevar a cabo trabajos de rehabilitación en la Cartuja de Aniago. Mientras tanto, la Asociación continúa organizando actividades para fomentar la rehabilitación de este espacio histórico.
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