VALLADOLID, 4 de noviembre. La Archidiócesis de Valladolid enfrenta un ajuste significativo en sus finanzas para 2024, con ingresos que alcanzan los 23,4 millones de euros. Este descenso, continua la tendencia observada desde 2021, resulta en parte de una notable caída en los legados y herencias, que regresan a niveles previos tras haber alcanzado cifras excepcionalmente altas en los dos años anteriores.

En un encuentro con la prensa, el arzobispo Luis Argüello, junto con el ecónomo Óscar Agüero y el delegado de Patrimonio Juan Carlos Álvarez, presentaron las cifras, revelando una caída del 1,9 por ciento en comparación con el año pasado, cuando los ingresos fueron de 23,8 millones. Agüero comentaba que los datos actuales reflejan un retorno a patrones más usuales tras dos años de anomalías en la captación de recursos.

El ecónomo destacó que, aunque se ha producido un descenso notable en lo que respecta a herencias, otros ingresos se mantienen, como los generados por los servicios ofrecidos por la Iglesia—incluyendo bodas, comuniones, y servicios funerarios. Estos ingresos, junto con los recibidos por actividades educativas a través de centros diocesanos, constituyen una parte esencial del presupuesto, aportando 9,5 millones, o cuatro de cada diez euros ingresados.

A pesar de la disminución en las ofrendas tradicionales, se ha observado un cambio en la forma en que los fieles apoyan a la institución, con un aumento en las suscripciones y cuotas fijas. Esta modalidad ha permitido a la Archidiócesis ingresar 4,5 millones, representando un 19,64 por ciento de su total recaudado. Otro aporte significativo proviene de la asignación tributaria, que ascendió a 4,7 millones, alcanzando el 20,4 por ciento de los ingresos totales.

Las comparaciones con el año anterior muestran descensos en varias áreas: las donaciones directas de los fieles cayeron de 6,3 millones a 4,5 millones, mientras que los ingresos patrimoniales disminuyeron levemente de 4,4 a 4,3 millones. A pesar de esto, se registró un incremento en la asignación tributaria por encima de 450.000 euros y un alza en los ingresos corrientes de 1,2 millones gracias a mejoras salariales para el personal docente y seculares.

Cuando se examinan los gastos, se observa que la conservación de edificios y gastos operativos consume casi el 40 por ciento del presupuesto, es decir, 8,9 millones de euros. La retribución al personal civil, que ahora asume labores que antes realizaban sacerdotes, representa un 24,3 por ciento del total, con 5,6 millones asignados para estos fines.

En cuanto a la dotación económica para el clero y acciones pastorales, sus cifras son de 2,8 millones y 2,1 millones respectivamente, alcanzando el 12,23 y el 9,14 por ciento del total. Los fondos dirigidos a la formación constituyen un ínfimo 1,07 por ciento, con 250.000 euros, mientras que la capacidad de financiación cifra en 3,4 millones, con gastos extraordinarios que apenas alcanzan los 6.000 euros.

Respecto al patrimonio, Juan Carlos Álvarez informó sobre inversiones realizadas en el Seminario, enfocadas en mejorar la accesibilidad y la eficiencia energética, con un presupuesto de 500.000 euros para tales mejoras, que serán inauguradas por el arzobispo Argüello el próximo 8 de diciembre.

La labor de la Iglesia en Valladolid también se hace palpable en términos de personal y comunidades. La diócesis cuenta con 208 sacerdotes, 1.256 religiosas y 2.002 catequistas, además de 303 parroquias que sirven a la comunidad.

En el ámbito educativo, hay 45 centros concertados católicos que acogen a 28.500 alumnos y están atendidos por 1.980 docentes. Asimismo, en el terreno misionero, están activos 206 misioneros de Valladolid, junto con seis familias que participan en misiones. La diócesis también cuenta con 75 Bienes Inmuebles de Interés Cultural y 21 proyectos destacados en construcción y rehabilitación.

Durante el año 2024, se registraron 1.575 bautizos, 1.723 confirmaciones, 2.075 primeras comuniones y 397 matrimonios. Además, se prestó atención a 51.516 personas en un centenar de centros, junto con el desarrollo de nueve proyectos de cooperación para el desarrollo a nivel global.

En la línea de estos logros, Argüello pronunció el lema para el Día de la Iglesia Diocesana de este año: "Tú también puedes ser Santo", subrayando que la auténtica santidad radica en vivir la caridad en su máxima expresión. Señaló la necesidad de apoyo espiritual y material, señalando que la riqueza de la Iglesia reside principalmente en su comunidad y el compromiso de quienes dedican su tiempo y esfuerzo a sustentar la acción pastoral y caritativa.