La viuda y las dos hijas del guardia civil Pedro Alfonso Casado, quien falleció el 1 de julio de 2022 en Santovenia (Valladolid) tras recibir un disparo presuntamente realizado por Pablo A.S.H, más conocido como 'Chiqui', solicitan una condena global de 84 años de cárcel para el acusado.
Esta petición se encuentra en el escrito de calificación provisional presentado por la Asociación Pro Guardia Civil (Aprogc), en representación de la familia del agente fallecido, según informan fuentes jurídicas a Europa Press. En el documento, la acusación particular describe los hechos como asesinato, tentativa de asesinato, atentado contra la autoridad, secuestro, coacciones y tenencia ilícita de armas.
Además, Francisco Peláez, abogado que representa a la acusación particular, solicita una indemnización de 600.000 euros para la esposa e hijas del guardia civil fallecido, por el daño moral sufrido y el lucro cesante.
El pasado 23 de enero, durante una comparecencia en el Juzgado de Instrucción número 4 de Valladolid, 'Chiqui' fue informado de los cargos que enfrenta por la muerte del agente y de su vecino, Dionisio A.P., así como por la tentativa de asesinato del hijo de este último, lesiones, detención ilegal por parte de Iván V. y tenencia ilícita de armas.
Además de la Fiscalía, la causa cuenta también con las acusaciones particulares de los familiares de las dos víctimas, así como de la persona que fue retenida en el domicilio. El Equipo Víctimas del Terrorismo de la Guardia Civil también se ha sumado como acción popular, junto a la defensa de 'Chiqui'.
El incidente tuvo lugar la noche del 30 de junio de 2022, cuando la Guardia Civil fue requerida para intervenir en una disputa entre dos familias vecinas. Durante la intervención, Dionisio A.P. y Carolina N.A., quienes resultaron agredidos, identificaron a sus agresores como residentes del mismo edificio.
Posteriormente, se produjo un trágico incidente en el que Dionisio A.P. recibió un disparo mortal en el abdomen y falleció poco después. Además, 'Chiqui' intentó atacar a Aitor A.N., hijo de Dionisio, quien logró escapar.
'Chiqui', identificado como Pablo Antonio S.H., se atrincheró en su domicilio junto con un rehén y se negó a salir durante varias horas, amenazando con matar a más personas. Durante ese tiempo, se escuchó un tiro dentro de la vivienda.
La Unidad Especial de Intervención (UEI) de la Guardia Civil, liderada por el teniente coronel Pedro Alfonso Casado, se desplazó al lugar. El agente fallecido intentó negociar con el secuestrador durante varias horas, hasta que este último disparó hacia los cuerpos de los agentes desde el interior de su vivienda, tras la puerta de acceso. Como resultado, el agente negociador recibió un impacto en la cabeza y falleció días después.
Finalmente, tras una negociación llevada a cabo por los miembros de la Guardia Civil, 'Chiqui' se entregó sin oponer resistencia a cambio de recibir metadona. Fue detenido posteriormente.
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