La Comisión Europea ha dado luz verde este martes a la creación de una empresa conjunta entre Volvo Business Services International AB y Renault SAS. El enfoque principal de esta colaboración será el desarrollo, producción y venta de vehículos comerciales ligeros eléctricos, así como la prestación de servicios logísticos.

Tras examinar la operación, la Comisión ha determinado que no existen problemas de competencia a raíz de esta concentración. Esto se debe a la posición limitada en el mercado resultante de la transacción propuesta.

La notificación de esta operación se ha llevado a cabo mediante el procedimiento simplificado de control de las operaciones de concentración, ya que ambas compañías pertenecen al sector de la automoción.

En octubre, Volvo y Renault anunciaron el nacimiento de esta empresa conjunta en respuesta a la creciente necesidad de una logística descarbonizada y eficiente. Además, declararon que la empresa francesa CMA CGM estaba interesada en unirse al proyecto, a la espera de la aprobación regulatoria.

La nueva empresa también buscará socios e inversores para lanzar la gama totalmente eléctrica "Software-Defined Vehicle" (SDV), cuya producción está prevista para comenzar en 2026.