
VALLADOLID, 21 de abril. La Audiencia provincial ha dictado una sentencia de dos años de prisión contra un individuo de nacionalidad colombiana, cuyas iniciales son S.E.M.R. Esta decisión se ha tomado tras un acuerdo entre la defensa y la fiscalía, a pesar de que el acusado no se presentó en el juicio debido a que se encuentra fuera del país y no se ha logrado su localización.
La falta de presencia del acusado permitió que el juicio se llevara a cabo de manera abreviada. La pena máxima que se podía solicitar sin su comparecencia era de dos años, lo que llevó a la fiscala a resignarse a aceptar una reducción de la condena, que inicialmente era de dos años y medio. Así, se ha optado por una sanción de 24 meses de prisión por un delito relacionado con la salud pública, además de multas por resistencia a la autoridad y lesiones leves a una miembro de la Policía Local, a quien deberá indemnizar con 350 euros.
A pesar de la conformidad alcanzada, el juicio se llevó a cabo con el testimonio de la pareja de agentes que detuvieron al sospechoso el 30 de agosto de 2024, frente al local ‘Juanita Calamidad’ en la Plaza de Poniente. Los policías detectaron la presencia de tres jóvenes en la zona y observaron que uno de ellos entregaba algo que parecía ser una bolsita a otro.
Uno de los agentes interceptó al comprador y a su acompañante, mientras que el otro policía se ocupó del presunto vendedor. Durante el interrogatorio al cliente, se le encontró una bolsa con droga en el bolsillo trasero de sus pantalones. El individuo admitió que se había citado con S.E.M.R. para adquirir un gramo y medio de cocaína, y reveló haber pagado 100 euros mediante una transferencia a través de su teléfono móvil.
El comprador mostró a la policía pruebas en su teléfono móvil, incluyendo una conversación por WhatsApp con el traficante, en la que además de solicitar el gramo y medio, preguntó si podía conseguir medio gramo adicional para un amigo. El cliente indicó que esta era la primera vez que compraba drogas a ese proveedor.
Mientras tanto, el otro agente mantenía bajo control al presunto traficante. En un momento, S.E.M.R. intentó escapar del lugar en un patinete eléctrico tras haber sido advertido de su detención. Aunque no logró huir, hizo uso de la violencia, agrediendo a la funcionaria con un puñetazo que la hizo caer al suelo. A pesar de la resistencia, los agentes lograron finalmente controlar al encausado y trasladarlo a la Comisaría de la Policía Nacional en Las Delicias.
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