En una reciente acción que ha desatado polémica, el Grupo Parlamentario Vox ha llevado una denuncia ante la Fiscalía de Valladolid contra Pablo Fernández, secretario regional de Organización de Podemos. La acusación se basa en el supuesto cometimiento de un delito de odio, según establece el artículo 510 del Código Penal español.

Esta denuncia surge en respuesta a los comentarios realizados por Fernández, que hicieron eco en diversos medios de comunicación. Durante su intervención, el dirigente de Podemos instó a la ciudadanía a boicotear la celebración de la Vuelta Ciclista a España en Valladolid, argumentando que el evento se ve comprometido por la participación de un equipo con patrocinadores de origen israelí. Fernández calificó dicha protesta como un acto de "desobediencia civil".

Desde Vox, han manifestado que las palabras de Fernández fomentan un clima de hostilidad hacia un grupo específico debido a su nacionalidad y etnicidad, al mismo tiempo que vulneran derechos esenciales de los ciclistas, quienes trabajan en este evento. En un comunicado dirigido a la prensa, la formación política ha enfatizado que es crucial condenar este tipo de actitudes en la esfera pública.

Además, Vox hizo hincapié en que es fundamental visibilizar y actuar contra tales manifestaciones, señalando como un ejemplo trágico las consecuencias que pueden acarrear, refiriéndose al asesinato del comentarista conservador Charlie Kirk sucedido recientemente.