El Consejo de Seguridad Nuclear llevó a cabo 14 inspecciones de seguridad durante 2022 en la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos), que se encuentra en fase de cese definitivo de explotación y en espera de iniciar el desmantelamiento, según informó el regulador durante la XIX reunión del Comité Local de Información este jueves en el Ayuntamiento del Valle de Tobalina.

El coordinador de Instalaciones Nucleares del CSN, Francisco Gallardo, presentó los trabajos de seguimiento y control realizados por el organismo en la instalación el pasado año, y explicó que mientras el titular de Garoña notificó solamente un suceso al CSN, que fue catalogado como 0 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES), el regulador llevó a cabo 14 inspecciones en Garoña durante 2022.

En la reunión se especificó que, después de la valoración global de la central nuclear Santa María de Garoña y las actuaciones del titular de las instalaciones en 2022, la planta ha funcionado con normalidad, sin incidencias significativas para la seguridad.

Por lo tanto, no fue necesario requerir la adopción de ninguna acción adicional a las ya establecidas en los planes de trabajo y en los programas de seguimiento y supervisión que el regulador lleva a cabo. Además de los miembros del CSN, la reunión contó con la presencia del subdirector general de Energía Nuclear del MITERD, José Manuel Redondo, la alcaldesa del Ayuntamiento de Valle de Tobalina, Raquel González, y otros representantes de la zona.

El subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, también asistió a la reunión junto a representantes de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias, y recordó la importancia de mantener altos estándares de seguridad pese al cese de la actividad en la planta.

El representante del Instituto para la Transición Justa, Francisco Martínez García, también estuvo presente en la reunión y presentó las líneas de ayuda a proyectos empresariales en el marco del Convenio de Transición Justa de Garoña. La planta está en cese definitivo de explotación desde el 6 de julio de 2013 y tramitando el licenciamiento del proyecto de desmantelamiento en la que titularidad de la central pasará a la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos que será la encargada de llevar a cabo el mismo.

El CSN controlará la fase 1 del desmantelamiento a través de evaluaciones, tanto generales como específicas, e inspecciones periódicas y por causas específicas.