SORIA, 10 Nov.
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Soria ha rechazado las medidas cautelares solicitadas por el Partido Animalista PACMA con las que se pretendía la suspensión del espectáculo denominado Toro de Jubilo previsto para este sábado en la localidad soriana de Medinaceli.
En base a la información proporcionada por el Gabinete de Prensa del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, el auto judicial ha determinado que el recurso contencioso administrativo presentado por el PACMA contra el acuerdo de la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Medinaceli no tiene fundamento, por lo que el espectáculo procederá como estaba planeado: este sábado a las 23:30 horas.
El objetivo principal del PACMA era evitar una repetición de la muerte que sufrió el toro en la última edición de este evento, y solicitaban su suspensión de forma cautelar. Sin embargo, el Juzgado ha decidido que el espectáculo pueda llevarse a cabo.
Al igual que ocurrió con el Torneo del Toro de la Vega en 2022, el PACMA ha llevado a cabo un análisis exhaustivo de la regulación del Toro de Jubilo, una celebración que tiene lugar cada mes de noviembre.
Según el equipo legal del partido animalista, se han encontrado irregularidades similares a las detectadas en el famoso y polémico torneo de Tordesillas, lo que llevaría a concluir que este espectáculo se ha estado realizando de forma ilegal durante años.
El Toro de Jubilo es el único evento taurino de este tipo que se celebra en Castilla y León. Para el PACMA, este tipo de espectáculos superan los límites de lo que el Reglamento permite en cuanto a la participación de los animales en los festejos populares.
El partido animalista denunció la muerte del toro en 2022 y ha argumentado que, si la delegada Territorial de la Junta de Castilla y León en Soria archivó la denuncia por la ausencia de infracciones, entonces la normativa que regula este evento podría permitir acciones que resulten mortales para el animal, a pesar de estar prohibida su muerte en público.
En las imágenes documentadas por el Partido Animalista, se puede apreciar el sufrimiento del animal desde el inicio del espectáculo, cuando este se mostraba resistente y emitía bramidos de angustia y dolor. Además, se observa que había estopa incandescente prendida en su cornamenta, que se desprendía y caía sobre su cara y su cuerpo.
El PACMA lamenta que en vez de prestar atención veterinaria al toro, las personas involucradas solo se enfocaron en retirarlo lo más rápido posible, tirando con fuerza de una cuerda atada a sus cuernos y cola.
Según el partido, la única preocupación de la organización era eliminar el cuerpo del animal de la vista de los asistentes para evitar ser sancionados, ya que la legislación autonómica prohíbe la muerte de los toros en presencia de público en los espectáculos taurinos populares y tradicionales.
Tanto el Toro de Medinaceli como el Torneo del Toro de la Vega de Tordesillas han podido celebrarse hasta ahora porque se consideran espectáculos taurinos "tradicionales" con más de 200 años de antigüedad probada.
Sin embargo, para mantener esta declaración de "tradicionalidad", cualquier modificación en la normativa reguladora debe seguir un procedimiento estricto establecido por la normativa autonómica.
Según el Partido Animalista, el Ayuntamiento de Medinaceli no siguió este procedimiento después de realizar una modificación en 2015, lo que implicaría que el festejo ha "perdido" su condición de tradicional y se ha estado llevando a cabo de manera ilegal desde entonces.
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