ZAMORA, 26 Jul.

La Diputación de Zamora, liderada por el presidente provincial Javier Faúndez, tiene previsto implementar un plan de obras extraordinario con un presupuesto de 16 millones de euros para los años 2024 y 2025.

Este miércoles, Faúndez confirmó la noticia antes de la primera reunión del Consejo de Alcaldes en el nuevo mandato, el cual comenzó el mes pasado. El plan beneficiará a todos los municipios de la provincia, excepto la capital, y será financiado por el remanente de tesorería.

Según Faúndez, los ayuntamientos podrán presentar las solicitudes para sus proyectos antes del 15 de septiembre y tendrán la opción de llevar a cabo las obras durante los dos próximos años. Las bases están diseñadas para "fomentar y apoyar a las zonas rurales y a las entidades locales más pequeñas". Además, esta vez se incluirá la financiación del 100% para la instalación de placas solares para uso público.

El presidente provincial anunció esta novedad acompañado por la delegada territorial de la Junta en Zamora, Leticia García Sánchez, cuya institución financiará el 50% de otra iniciativa que permitirá llevar a cabo proyectos en los pueblos. Se trata del Fondo de Cohesión Territorial, que aportará más de tres millones de euros a las localidades de la provincia.

La mitad de esos fondos provendrán del Gobierno autónomo, mientras que la Diputación y los ayuntamientos se repartirán la otra mitad equitativamente.

Estas noticias se dieron a conocer justo antes del "inicio de una nueva etapa en uno de los órganos que estuvo paralizado durante los últimos años", según resaltó Faúndez al referirse al Consejo de Alcaldes.

El Partido Popular y el PSOE, siendo las dos principales fuerzas políticas en la provincia, han llegado a un acuerdo para establecer la nueva estructura de esta figura de carácter consultivo. La alcaldesa de Villarrín, Ainhoa Aranguren (PP), será la presidenta, mientras que el alcalde de Almeida de Sayago, Miguel Alejo (PSOE), fungirá como vicepresidente.

Faúndez señaló que el objetivo de la Diputación es que el Consejo de Alcaldes tenga la capacidad de hacer sugerencias sobre la gobernanza provincial y que comience a funcionar a través de la mediación de la presidenta y el vicepresidente, así como mediante la convocatoria anual de al menos una reunión y otra para la presentación de cada presupuesto durante este mandato.

Esta periodicidad no se cumplió en los años anteriores, cuando Francisco José Requejo, primero con Ciudadanos y luego como no adscrito, lideraba un gobierno compartido con el PP.

En este sentido, la nueva presidenta del consejo agradeció la confianza del partido y se mostró dispuesta a "luchar por mantener los pueblos y resolver sus problemas", mientras que el vicepresidente socialista abogó por mantener "un clima de tranquilidad y voluntad de llegar a acuerdos" para facilitar la vida de las personas en las pequeñas localidades.