La estación de esquí de San Isidro, a cargo de la Diputación de León, da la bienvenida a la temporada invernal en este primer fin de semana de Navidad, ofreciendo a los amantes de la nieve la oportunidad de deslizarse por ocho kilómetros de pistas esquiables. En contraste, la estación de Valle de Laciana-Leitariegos permanece cerrada debido a la escasez de nieve, lo que limita las opciones para quienes buscan disfrutar de este deporte en la provincia.

San Isidro se presenta como el destino preferido para los entusiastas del esquí, con un total de ocho pistas disponibles para todos los niveles: tres de ellas están clasificadas como verdes, ideales para principiantes, mientras que dos son azules y tres rojas, aptas para esquiadores más experimentados. Además, seis remontes están operativos en las áreas abiertas, Cebolledo y Riopinos, con excelentes condiciones de nieve que varían de 20 a 30 centímetros de espesor en esta jornada.

Por el contrario, la estación de Valle de Laciana-Leitariegos se encuentra fuera de servicio debido a la falta de nieve, y no se prevé la reapertura hasta que las condiciones mejoren y se puedan garantizar una experiencia segura y placentera para los esquiadores.

Cabe destacar que el primer fin de semana de la temporada, que tuvo lugar del 13 al 15 de diciembre, atrajo a un total de 3.454 esquiadores en ambas estaciones. De este grupo, 2.536 optaron por San Isidro, mientras que 918 se registraron en Valle Laciana-Leitariegos, lo que pone de manifiesto la popularidad de la primera en comparación con su contraparte cerrada.