VALLADOLID, 5 de mayo.

José Luis Sanz Merino, consejero de Movilidad y Transformación Digital de la Junta de Castilla y León, ha expresado su deseo de que la situación provocada por el reciente apagón que afectó a la Península se regularice pronto. Este incidente, ocurrido el lunes pasado, ha generado dificultades en las comunicaciones, las cuales deben ser resueltas por Renfe, Adif y los ministerios implicados.

El titular de movilidad se pronunció tras ser cuestionado sobre la interrupción del servicio de alta velocidad que conecta Madrid con Sevilla, la cual se produjo la noche anterior. Afortunadamente, esta interrupción no ha afectado directamente a los viajeros de Castilla y León, dado que los trenes de la comunidad llegan a Madrid por la estación de Chamartín y no por Atocha, que es donde se concentraron los problemas del tráfico ferroviario.

Los ciudadanos de Castilla y León han podido moverse con normalidad, aunque han enfrentado ciertos inconvenientes si necesitaban transferirse de Chamartín a Atocha para tomar otros servicios de tren hacia diferentes destinos en el país.

Sanz Merino destacó que la situación ha perdurado durante más de una semana y catalogó las dificultades en la regulación de las comunicaciones como un “imponderable” y una “fuerza mayor”, sin ofrecer detalles adicionales sobre el suceso.

El consejero manifestó su esperanza de que las compañías ferroviarias y las autoridades involucradas logren regresar a la normalidad lo antes posible tras este contratiempo. Finalizó su intervención subrayando la necesidad de recibir información clara sobre el incidente para prevenir que situaciones similares se repitan en el futuro.