VALLADOLID, 5 de noviembre.

En un emotivo encuentro, el empresario Gregorio Álvarez Cabreros, de la firma Ibereólica, expresó su frustración al recordar las dificultades que enfrentó en el desarrollo de sus proyectos de energía eólica. Durante una charla, Álvarez relató que se vio forzado a incorporar socios locales, un requisito que consideró injusto, sobre todo al ser originario de Zamora y haber realizado inversiones millonarias en la región, que suman hasta 130 millones de euros.

El empresario no dudó en señalar al entonces viceconsejero de Economía, Rafael Delgado, como el principal responsable de esta situación, subrayando que él tenía gran poder en la toma de decisiones. “Era quien tenía el control sobre los proyectos”, afirmó, dejando claro su descontento ante la presión ejercida que lo obligó a alejarse de sus iniciativas eólicas.