VALLADOLID, 1 de diciembre.

En un gesto de solidaridad y compromiso intercomunitario, el Ayuntamiento de Valladolid ha decidido enviar a un grupo de ocho agentes de la Policía Municipal a Sedaví, en Valencia. Esta acción se produce en respuesta a los efectos devastadores de la DANA que tuvo lugar el 29 de octubre, y su objetivo es colaborar en las labores de control del tráfico y ofrecer asistencia a la población afectada.

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, mostró su apoyo a los agentes durante una reunión en la Comisaría del barrio de La Victoria, justo antes de que partieran hacia la Comunidad Valenciana. Ahí, les deseó “suerte” y destacó su “trabajo” y “predisposición” ante la complicada situación que enfrentarán.

Carnero mencionó la naturaleza de esta acción como una colaboración con una “comunidad hermana”. Los agentes estarán presentes inicialmente por un período de diez días, aunque existe la posibilidad de extender su misión por otros diez días si la situación lo requiere. Serán equipados con todos los recursos necesarios para llevar a cabo sus funciones en un contexto tan desafiante.

Durante este encuentro, el alcalde no estuvo solo; le acompañaron el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Cuadrado, y la concejala de Participación Ciudadana y Deportes, Mayte Martínez, reforzando así el compromiso del Ayuntamiento con esta misión de ayuda.

Desde el Centro de Coordinación de Emergencias de la Comunidad Valenciana han reiterado la urgencia de contar con efectivos uniformados en la zona. Actualmente, Sedaví se encuentra en una etapa crítica de reconstrucción y rehabilitación de infraestructuras, por lo que las calles están saturadas de maquinaria pesada, lo que complica aún más la situación.

Además, han subrayado la necesidad urgente de retirar vehículos de garajes y calles, ya que estos representan un riesgo significativo, debido a que pueden generar incendios y explosiones, poniendo en peligro a la ciudadanía. Esta preocupación se intensifica en un contexto donde los cuerpos de policía local son limitados y sus efectivos han estado realizando turnos dobles y trabajando en días de descanso durante casi un mes, llevándolos al límite de su capacidad.