Los miembros de la Unidad de Protección de la Naturaleza (UPRONA) de la Guardia Civil de Valladolid están llevando a cabo una investigación sobre un vecino de Pedrosa del Rey que se sospecha que abandonó y maltrató a una perra que fue encontrada en un estado lamentable.

La investigación se inició cuando alguien encontró a la perra abandonada en una carretera en Pedrosa del Rey y, al traerla a casa, solicitó ayuda veterinaria para la evaluación del animal.

El veterinario informó al Seprona de la Guardia Civil después de explorar al animal, ya que el perro estaba en un estado evidente de abandono y necesitaba una cirugía urgente debido a una tumoración abierta e infectada, así como el hecho de que llevaba varios años sin vacunar contra la rabia.

Ante la gravedad de la situación, los miembros de la Guardia Civil activaron el protocolo sobre perros abandonados e informaron a los responsables de la Diputación de Valladolid, quienes recogieron a la perra de manera inmediata y la atendieron de forma urgente, incluyendo la cirugía que necesitaba.

En las instalaciones de la perrera provincial, la perra se está recuperando satisfactoriamente.

Paralelamente, el equipo del Seprona pudo localizar al propietario gracias al microchip del animal, y se instruyeron diligencias al respecto. Además, se solicitó al Juzgado, como medida cautelar, el cambio de titularidad del animal.

Si se demuestra que el propietario es responsable de los hechos, las posibles consecuencias penales podrían incluir una pena de prisión de tres a dieciocho meses o multa de seis a doce meses, así como la inhabilitación especial de uno a tres años para la realización de cualquier tipo de profesión, oficio o comercio relacionado con animales.