24h Castilla y León.

24h Castilla y León.

Ayala enfrenta revés en la confianza, pero el presupuesto podría ser aprobado en un mes.

Ayala enfrenta revés en la confianza, pero el presupuesto podría ser aprobado en un mes.

BURGOS, 28 de noviembre.

La alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, enfrentó este jueves una drástica derrota en la cuestión de confianza que presentó durante el pleno del Ayuntamiento. La votación concluyó con 16 votos en contra y solo 11 a favor de su gestión. De esta manera, Ayala deberá esperar una improbable alianza entre Vox y el PSOE para intentar presentar una moción de censura en su contra, algo que los portavoces de ambas formaciones ya han descartado de manera contundente.

Durante la sesión, Fernando Martínez-Acítores, portavoz del Vox y ex vicealcalde, declaró que su partido optará por una oposición "constructiva pero contundente". Por su parte, Daniel de la Rosa, portavoz del PSOE, afirmó que el Partido Popular pronto conocerá las realidades de gobernar en minoría, sugiriendo que podrían arrepentirse de su situación actual.

Tras la sesión, Ayala hizo un llamado a PSOE y Vox. Durante la conferencia de prensa en la que explicó la nueva estructura del equipo de Gobierno, pidió a ambas formaciones registrar por escrito su negativa a pactar una moción de censura, con el objetivo de acelerar los tiempos para la aprobación del presupuesto del próximo año.

Además, Cristina Ayala deberá solicitar un informe jurídico al secretario del Ayuntamiento. Este informe determinará si es obligatorio someter el proyecto de presupuesto de 2025 a información pública para considerar alegaciones antes de su aprobación definitiva, o si, tras un mes de la pérdida de confianza, se podría aprobar de forma definitiva sin más trámites.

La alcaldesa ha defendido su decisión de presentar la cuestión de confianza al subrayar la relevancia de contar con un presupuesto esencial para la ciudad. En su argumentación, mencionó que cuando es difícil "sacar adelante las cuentas", el "legislador" cuenta con esta herramienta como vía de desbloqueo y solucion.

Ayala también insistió en que el presupuesto permitirá ejecutar "30 millones en inversiones", de los cuales cinco están destinados a programas cívicos, además de otras iniciativas relacionadas con instalaciones deportivas, entre muchas otras propuestas.

El desarrollo del presupuesto se llevará a cabo en dos fases diferentes: la primera se refiere a las cuentas iniciales y la segunda a las modificaciones que pudieran surgir. Para la aprobación de la primera fase, Ayala ha recurrido a la "cuestión de confianza", mientras que para las modificaciones será necesaria la negociación. La alcaldesa, no obstante, ha sido clara al expresar su desconfianza hacia el PSOE, rechazando cualquier intento de "chantaje" que restrinja el espacio para el pacto.

Fernando Martínez-Acítores añadió que el acuerdo se rompió por parte del PP tras haber llegado a un consenso sobre el proyecto de presupuestos. Inicialmente, este proyecto excluía a tres ONGs que trabajan con inmigrantes de las ayudas, aunque después el Partido Popular decidió revertir esa decisión y volver a incluir a estas entidades.

Así, Martínez-Acítores puntualizó que su partido "buscó una solución que nunca llegó", ya que se votó un acuerdo "que no fue" y resultó en la "expulsión de Vox del equipo de Gobierno". Sin embargo, el exvicealcalde se comprometió a mantener una oposición "constructiva", aunque también dejó claro que será "dura y contundente" cuando la situación así lo demande.

Por su parte, la portavoz del PP, Andrea Ballestero, mencionó que la oferta del PSOE para colaborar "encierra un chantaje", que el equipo de Gobierno no podrá aceptar, dado que condiciona la acción del mismo, buscando influir en el 50 por ciento de las modificaciones presupuestarias que se propongan.

Finalmente, Ballestero recordó a De la Rosa que su partido tuvo una oportunidad de gobernar, pero su mandato resultó en cuatro años improductivos, dejando como legado múltiples "chapuzas".

En respuesta, De la Rosa argumentó que la alcaldesa ha perdido la cuestión de confianza debido a su "prepotencia" y "falta de capacidad para negociar" con la oposición, lamentando que Ayala había despreciado al PSOE incluso al extender una mano dispuesta a colaborar.