El secretario general de UGT en Castilla y León, Faustino Temprano, se ha mostrado confiado en la victoria de los sindicatos UGT y CCOO en el juicio que se celebrará próximamente, en el que demandan el mantenimiento del Servicio de Relaciones Laborales (Serla) en la comunidad autónoma.
Según Temprano, desde que se presentó la demanda, ha habido cambios significativos en Castilla y León. En un principio, la Junta pretendía eliminar por completo el Serla, pero tras la intervención de la ministra de Trabajo y las presiones tanto del Gobierno como de organismos internacionales, han realizado una segunda propuesta en la que se permite la existencia del Serla, pero con una reducción de funciones y una reestructuración interna.
El Serla, dentro del diálogo social, no solo se ocupa de conflictos colectivos, sino también de conflictos individuales, los cuales hasta ahora solo se habían llevado a cabo en Valladolid y no se habían extendido al resto de capitales de provincia. La Junta quería eliminar los casos individuales y mantener solo los colectivos.
Otro punto de discrepancia fue el cambio de sede del Serla. Para los sindicatos, siempre y cuando haya ahorro, no hay problema en cambiar de ubicación, pero lo fundamental es que los trabajadores tengan puestos de trabajo dignos y que alguien se preocupe por ellos.
Además, la Junta propuso reducir a la mitad el número de mediadores en el Serla, lo cual fue rechazado por los sindicatos. Ante la falta de acuerdo y la negativa de la patronal a apoyar las demandas, el juicio tendrá lugar y los sindicatos confían en su victoria.
Temprano ha enfatizado que, a pesar de lo que se haya dicho, el Serla sigue funcionando en Castilla y León para los temas individuales en Valladolid y los colectivos en el resto de provincias.
El único problema actualmente es el presupuesto aprobado por la Junta, que tenía fondos hasta septiembre y el consejero se comprometió a inyectar 400.000 euros, aunque Temprano desconfía de la palabra de Mariano Veganzones.