
El pasado sábado, alrededor de 70 activistas se unieron en Medinaceli, Soria, para expresar su rechazo al Toro Jubilo, una antigua festividad que ha sido objeto de controversia por su tratamiento hacia los animales. Este evento ha sido organizado por el Partido Animalista (Pacma), el cual ha logrado que, a través de recursos legales, se suspenda esta tradición que ya estaba programada para celebrarse.
La concentración dio inicio a las 18:00 horas, en las inmediaciones del Ayuntamiento, y aunque las voces se alzaron en contra de esta tradición, la manifestación transcurrió sin incidentes. Los participantes lucieron pancartas y corearon consignas que abogan por un trato más justo y ético hacia los animales, reflejando un creciente descontento social contra las prácticas que implican sufrimiento animal.
Uno de los rostros visibles de la protesta fue Asunción Estévez, representante de Pacma en Madrid, quien celebró la decisión del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Soria de suspender el festejo taurino. Estévez se mostró optimista, esperando que esta medida se consolide y se haga definitiva, lo que marcaría un avance importante en la lucha por los derechos de los animales en eventos festivos.
Además, Estévez enfatizó que la meta principal de Pacma es abolir todas las celebraciones taurinas que causen sufrimiento a los animales. En su intervención, recordó que el caso de Medinaceli se considera especialmente relevante dado que se han registrado actos que evidencian daño hacia el toro y múltiples irregularidades en las normativas que regulan la celebración. Su postura resuena con la creciente demanda social por la protección animal y el cuestionamiento de tradiciones que, cada vez más, son vistas como obsoletas y crueles.
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