La ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha acusado a la Junta de Castilla y León de incentivar el abandono de los pueblos al cerrar ambulatorios y servicios educativos.

Ribera hizo estas declaraciones en respuesta a una pregunta del diputado de Foro Asturias, Isidro Martínez Oblanca, durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso sobre las medidas contra la despoblación en el Principado.

La vicepresidenta tercera ha defendido políticas de cohesión territorial y ha cargado contra el PP y Vox, partidos que gobiernan en Castilla y León, acusándoles de cerrar servicios públicos fundamentales.

Ribera ha destacado la importancia de las medidas contra la despoblación, como la asistencia a los mayores y la atención a las necesidades de los niños, y ha rechazado la idea de obligar a las mujeres a tener hijos.

En respuesta, el diputado de Foro ha solicitado a Ribera un impulso socioeconómico para evitar la muerte lenta de los pueblos y detener la disminución de la población en el Principado.