La ruta milenaria del Camino Lebaniego Castellano, trazando 222 kilómetros por Palencia y narrando cinco siglos de historia

La ruta milenaria del Camino Lebaniego Castellano, trazando 222 kilómetros por Palencia y narrando cinco siglos de historia

PALENCIA, 1 Oct.

El Camino Lebaniego Castellano es una experiencia cultural y social que parte de la capital palentina, y que a través de 222 kilómetros recorre la provincia, de sur a norte, en una ruta con más de cinco siglos de historia para llegar hasta el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, donde se custodia un trozo de madera que se atribuye a la Cruz de Cristo.

Este camino es un símbolo de conexión y unión entre la meseta castellana y los puertos del norte. Además, se cruza con el Camino de Santiago Francés en los municipios de Frómista y Boadilla del Camino, potenciando así el sentido de comunidad y fraternidad entre los peregrinos.

El recorrido del Camino Lebaniego Castellano comienza en la dársena de la capital palentina y pasa junto al famoso Canal de Castilla, una obra de ingeniería hidráulica del siglo XVIII. A lo largo del camino, los peregrinos podrán disfrutar de los extensos campos de cereal de Tierra de Campos y visitar diversos lugares de interés cultural, como la torre de San Hipólito en Támara de Campos y las iglesias de San Juan en Santoyo y San Miguel de Piña de Campos.

A su paso por Frómista, los peregrinos podrán admirar la iglesia de San Martín de Tours, una joya del Románico, y encontrarse con los caminantes del Camino de Santiago Francés. La ruta sigue hacia Osorno la Mayor, pasando por el yacimiento del Dolmen de Velilla y permitiendo explorar el patrimonio de la iglesia de la Asunción de Osorno.

Para llegar al Monasterio de Santo Toribio, el camino atraviesa tierras burgalesas en Melgar de Fernamental y discurre por diversas esclusas del Canal de Castillo. En Ventosa, se encuentra el centro de interpretación del Canal, donde los peregrinos pueden aprender sobre su historia y funcionamiento.

Desde Herrera, la ruta se dirige hacia Alar del Rey y se aleja del Canal de Castilla para pasar por Prádanos de Ojeda, San Andrés del Arroyo y Cozuelos, donde se puede visitar una ermita dedicada a Santo Toribio. A medida que se avanza, el paisaje está dominado por la Montaña Palentina hasta llegar a Cervera de Pisuerga, una villa declarada BIC que alberga diversos tesoros culturales, como la Iglesia de Santa María con su retablo de Juan de Flandes, la Casa del Parque y el Museo Etnográfico dedicado a Piedad Isla.

La ruta continúa por el embalse de Requejada y atraviesa bosques de robles hasta San Salvador de Cantamudá, donde destaca su impresionante colegiata. Desde allí, se sigue hacia el puerto de Piedraslenguas, situado entre la provincia de Palencia y la Comunidad de Cantabria.

El Camino Lebaniego Castellano permite a los peregrinos descubrir la provincia palentina, su rica gastronomía, sus joyas del románico y sus variados paisajes. Además, culmina en el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, un destino de peregrinación cargado de espiritualidad y significado histórico.

Categoría

Castilla y León