VALLADOLID, 4 de octubre.

El Partido Animalista (Pacma) ha solicitado una profunda rendición de cuentas tras la muerte de una vaquilla que fue atropellada por un quad durante un encierro campero en Bolaños de Campos el pasado 3 de octubre. Este trágico incidente ha reabierto el debate sobre la seguridad y el bienestar animal en estos eventos.

Desde Pacma, han exigido que se lleve a cabo una investigación exhaustiva sobre lo ocurrido, destacando que este siniestro es un eco de un accidente similar que tuvo lugar en 2018 en el mismo lugar, cuando otra vaquilla perdió la vida por un atropello durante un festejo similar.

Los representantes del partido han enfatizado que, siete años después, la historia se repite, evidenciando que no se han implementado las medidas necesarias para garantizar la protección de los animales. Según ellos, el nuevo atropello pone de manifiesto la falta de control y supervisión por parte del Ayuntamiento de Bolaños de Campos, lo que compromete tanto la integridad de los animales como la seguridad de los participantes y del público asistente.

Pacma ha criticado la indiferencia de las administraciones que continúan permitiendo y financiando espectáculos en los que los animales son tratados como meros objetos, exponiéndolos a un sufrimiento injustificable. Para el partido, es completamente inaceptable que se mantenga esta situación bajo el pretexto de la tradición.

Ante esta lamentable situación, la organización está considerando tomar acciones legales, argumentando que los acontecimientos deben ser investigados de manera urgente por la Junta de Castilla y León —responsable de autorizar la participación de vehículos en estos eventos— así como por la Guardia Civil.

A través de estas acciones, Pacma busca esclarecer las circunstancias que rodearon el accidente y determinar posibles negligencias o incumplimiento de normativas por parte de los organizadores y el propio Ayuntamiento. Además, han solicitado que se revise de inmediato la autorización de este tipo de festividades y se aplique sanciones a los responsables.

Finalmente, el partido ha subrayado que el maltrato animal no puede justificarse en nombre de la tradición y ha concluido que este reciente atropello en Bolaños de Campos pone de manifiesto que los festejos taurinos son incompatibles con los valores y la ética de una sociedad en evolución.