La delegada del Gobierno de Castilla y León, Virginia Barcones, ha expresado su opinión sobre el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, afirmando que considera que "le queda grande el cargo que ostenta". Esto se debe a su participación en una concentración frente al PSOE de Valladolid en la que se entonaron cánticos racistas.

Barcones ha destacado que García-Gallardo no está actuando con la responsabilidad que se espera de alguien en su posición, y ha agregado que la democracia está por encima de cualquier manifestación o comentario irrespetuoso. Ha criticado a los dirigentes políticos que no están a la altura de las instituciones que representan ni del pueblo de Castilla y León, que busca la convivencia y la concordia entre personas con diferentes puntos de vista políticos.

La delegada del Gobierno también ha advertido que "sembrar el odio entre bandos no es patriótico" y ha instado a todos los cargos institucionales a comportarse de manera responsable y ejemplar. Ha enfatizado que asistir a manifestaciones sin notificar, incitar al odio y entonar cánticos que promueven el odio hacia determinados grupos o partidos políticos no es apropiado.

Barcones ha recordado que lleva días llamando a la concordia y al respeto, y ha subrayado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado continuarán realizando su trabajo con los dispositivos necesarios en cada momento.