El arzobispo de Burgos, Mario Iceta, ha sugerido a la alcaldesa Cristina Ayala que la futura plaza que se construirá en el barrio de Capiscol sea bautizada con el nombre del papa León XIV. Esta propuesta se basa en el deseo del actual pontífice de rendir homenaje a León XIII, considerado el precursor de la doctrina social de la Iglesia.

La propuesta fue presentada durante una rueda de prensa en la que Iceta y Ayala anunciaron la firma de un protocolo de intenciones para ceder al Ayuntamiento una parcela de 2.000 metros cuadrados. Este terreno se destinará a satisfacer una demanda histórica de los residentes de Capiscol, un barrio de raíces obreras.

Iceta destacó la relevancia histórica detrás del nombre sugerido, recordando que León XIII, quien impulsó la Doctrina Social de la Iglesia entre finales del siglo XIX y principios del XX, se encuentra vinculado a un periodo de transformación social durante la Revolución Industrial. Por su parte, el arzobispo remarcó que León XIV lidera la Iglesia en un nuevo contexto de revolución, esta vez de carácter tecnológico.

La alcaldesa ha expresado su agradecimiento por la disposición del Arzobispado, subrayando que la colaboración entre la Iglesia y el Ayuntamiento no se queda en palabras, sino que se traduce en acciones concretas, como el protocolo firmado recientemente.

Ayala recordó que la creación de esta plaza es un compromiso a largo plazo, que busca satisfacer las demandas de los vecinos que han aguardado por su realización durante décadas. La parcela, que se ubica cerca de la parroquia de El Salvador, había sido previamente cedida por el Ayuntamiento para la edificación de la iglesia y otros servicios, pero 1.600 de los 2.000 metros cuadrados quedaron sin desarrollar.

La alcaldesa también enfatizó la importancia del acuerdo, que se realiza sin costo para el Ayuntamiento, aunque con condiciones: la reserva de espacios para futuras extensiones de los salones parroquiales y la posible reversión de la parcela a la Iglesia si se busca obtener beneficios económicos de ella.

De acuerdo a los planes, la construcción de la plaza podría iniciarse el próximo año, dependiendo de la aprobación del presupuesto, con una proyección de finalización para finales de 2026 o principios de 2027.

La parcela destinada a la nueva plaza, que anteriormente formaba parte del atrio de la parroquia de El Salvador, se valoró en 1,98 millones de euros, según el concejal de Hacienda y Patrimonio, Ángel Manzanedo.

Iceta resaltó que la misión de la iglesia es contribuir al bienestar común, y esta cesión se enmarca dentro de esa labor, aspirando a que el nuevo espacio público se convierta en un punto de encuentro y convivencia para los vecinos.

En cuanto al diseño de la plaza, la alcaldesa afirmó que se buscará la participación de los residentes para identificar sus preferencias y necesidades, de modo que el proyecto se desarrolle en colaboración con la comunidad y los técnicos del Ayuntamiento.