El desempleo en Castilla y León ha mostrado una ligera mejoría en marzo, con una reducción del 3,63% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este descenso, aunque positivo, se sitúa por debajo de la media nacional, que se ha establecido en un 5,39%, evidenciando que la región aún enfrenta desafíos en el ámbito laboral.

Según los datos proporcionados por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, el número de personas desempleadas inscritas en las oficinas de empleo de la comunidad ha disminuido en 1.270, alcanzando un total de 108.669 personas. Este volumen es considerablemente menor que en marzo de 2024, cuando se registraron 2.615 convocatorias menos, lo que sugiere que la tendencia descentralizada del empleo continúa impactando a la región.

De manera relativa, el desempleo en Castilla y León ha experimentado un descenso del 1,16% en marzo en comparación con febrero, representando la mitad de la reducción del año anterior. Aunque esta cifra es un avance, se considera el quinto mayor descenso relativo a nivel nacional y el cuarto en números absolutos, superando así el promedio del país, donde la caída fue de solo un 0,51%. En conjunto, el total de parados en España ha disminuido en 13.311, situándose en 2,58 millones.

Desde la perspectiva más amplia de la evolución interanual, el paro en Castilla y León ha caído un 3,63% respecto a marzo de 2024, lo que equivaldría a 4.096 personas menos desempleadas. Este resulta ser el cuarto menor descenso porcentual registrado y también inferior a la reducción del 5,75% observada el año anterior. En contraste, a nivel nacional, la disminución ha sido significativamente mayor, alcanzando un 5,39% y marcando 146.865 personas que han salido de las listas del desempleo.

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