En la ciudad de Valladolid, el 11 de octubre, la Unión de Campesinos en Castilla y León (UCCL) ha exigido la implementación de un plan de ayudas para la reconstrucción de las instalaciones agrícolas afectadas por un reciente temporal que trajo consigo vientos superiores a los 100 kilómetros por hora, causando un gran número de daños, incluyendo la pérdida de cosechas.

UCCL ha expresado su preocupación por los casos de naves e instalaciones agrícolas y ganaderas en Castilla y León que sufrieron la voladura de tejados y cubiertas, así como la destrucción de cultivos.

Además, han señalado el retraso en la cosecha de girasol a causa de las fuertes lluvias, y han reportado casos en los que los vientos derribaron las plantas, haciendo imposible su recolección.

La organización agraria ha informado que muchas patatas aún se encuentran en los campos y han advertido que, en algunos casos, ya no podrán ser recuperadas, especialmente en Burgos, Palencia y Zamora, donde el exceso de lluvia ha afectado las zonas patateras.

UCCL ha aconsejado a los afectados que informen a sus seguros privados y a Agroseguro de manera inmediata, y que notifiquen a sus ayuntamientos para poder poner en marcha un plan de apoyo urgente a través de las diputaciones, con el fin de reconstruir las instalaciones dañadas y compensar las pérdidas de cultivos no cosechados, mediante la declaración de zona catastrófica.

Asimismo, han recordado que se espera una nueva incidencia climatológica a partir de mañana, que traerá consigo lluvias abundantes y fuertes vientos en la Comunidad. La OPA ha expresado su esperanza de que los cultivos no se vean gravemente afectados y de que los agricultores puedan seguir preparando las tierras para la siembra, a pesar de los altos costos de producción y los bajos precios del cereal de la temporada pasada que han dificultado la situación financiera de los agricultores.